sábado, 24 de septiembre de 2011

LOS PELOS DE MORFEO: CAZA DE BURBUJAS.


Bienvenidos a la nave del sueño.
Acabo de cargarme una frase con gancho.
Amadme.

Estaba en la universidad, en un campus que era una mezcla de la parte de hoteles de Disneyland París y el Resistance 3. Estaba reunida con un montón de alumnos en un trinchera mágica que había por ahí, entonces, escuché que alguien estaba tocando esta canción y empecé a oír gritos y chillidos.



Alas, poor Yorick! I knew him, Horatio.


Corrían porque mi profesora de castellano estaba ''pillando'' gente, así que yo, como no iba a ser menos, empecé a correr y a dar vueltas como todos los que me rodeaban. Entonces me cogió y me dijo que la ayudara a capturar a Las Infractoras. Yo no sabía de qué me estaba hablando así que asentí y seguí corriendo. Mientras corría ví a tres chicas de mi clase actual con antifaz y capa corriendo con los brazos levantados, me pararon y me dijeron que sabían lo que me había dicho La Profesora y que no le contara a la villana que las había visto. Entonces, seguí corriendo y me escondí entre unos escombros.
FIN.


Nota: No entiendo por qué suenan canciones en mi cabeza, ni por qué sueño que mis compañeras de clase son lo suficientemente geniales para llevar capa y correr con los brazos levantados, solo sé que esto ha sido algo así como una pesadilla y que me encanta tener pesadillas, en serio. Un día haré un especial contándoos las pesadillas que se me han quedado grabadas en la mente, algunas las tuve con cinco años y siguen ahí. En fin, esta es una pesadilla muy light y de baja calidad así que mañana probablemente ni me acuerde de ella. Pero una cosa sé segur: este curso es mierda, quiero que me devuelvan mi dinero.

sábado, 10 de septiembre de 2011

LOS PELOS DE MORFEO: TARTAS, DROGAS Y ROCK'N'ROLL

Bueno, probablemente no vuelva a escribir nada en esta sección porque no suelo recordar los sueños durante las clases. Así que ya podéis aprovechar y dejar comentarios.


Estaba viajando con toda mi família por la carretera cuando después de muchas horas decidimos parar a comer algo en una estación de servicio. Esa estación de servicio resultó ser mi casa, que resultó ser un bar de tipos duros.

Así de duros eran.

Entré, me acerqué a la barra y le pedí al señor ex presidiario, marinero, militar expulsado por volverse loco, camarero la carta. Esta tenía una amplia variedad de tartas riquísimas entre las cuales yo era incapaz de elegir. Así que estuve un buen rato nerviosa y dudosa en la barra pensando qué preferiría, la de manzana, mazapán o arándanos, cuando se acercó a mí el asesino en serie camarero y me dijo amablemente que podía ir a sentarme a una mesa y elegir más tranquilamente si quería. Y como el señor me cayó súper bien -me pareció adorable- me hice amiga de todos los tipos duros del bar y entonces me invitaron a una bebida rosa con purpurina muy densa y yo compré todas las tartas para invitar a mis rudos amigüitos. Finalmente, fuimos felices y comimos mucha tarta.

viernes, 2 de septiembre de 2011

LOS PELOS DE MORFEO: BAÑO DE SANGRE.

¡Qué bien señores! ¡He vuelto a soñar!

Esta vez me he encontrado con dos compañeros en mi clase del año pasado. Estábamos hablando de algo gracioso, no tengo más información, cuando de repente apareció una amiga que tuve hace 4 años o así que era polaca y muy rubia y nos propuso ir a una bolera.
En el camino mis compañeros se debieron morir o algo porque desaparecieron, así que al final llegamos la polaca y yo a la bolera que casualmente estaba en Polonia. Recuerdo que la entrada de la bolera era un agujero en un desierto helado.
En seguida entramos y vi que había una piscina de sangre muy muy profunda, entonces ella me propuso saltar desde un trampolín. Fuimos a saltar del trampolín que resultó estar a 120m de altura. Después de subir las escaleras y justo cuando estaba encima de la tabla no sé cómo me convertí en rubia y salté.

Así de bonita salí de la piscina.


Hasta aquí todo normal, el caso es que al salir de la piscina me encontré con un montón de hombres que me miraban mal, con desaprobación y mala leche. Eran islamistas radicales. Me empezaron a decir que era una fresca y que era mala persona y a vacilarme de mala manera así que decidí patearles el trasero al puro estilo Tekken.

Adoro esta serie.


Y ya está, porque justo en ese momento mi hermano me despertó para pedirme a ver si le dejaba el portátil. Espero que os cunda, porque me he enganchado a Fringe y hasta que no acabe no pienso volver a entrar aquí.